El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, anunció este lunes su dimisión anticipada, poniendo fin a su mandato antes de las elecciones presidenciales programadas para mayo. Iohannis afirmó que su renuncia busca evitar una crisis política, ya que el Parlamento estaba a punto de iniciar un proceso de destitución en su contra.
Tras la anulación de las elecciones presidenciales de diciembre debido a sospechas de injerencia rusa, Iohannis extendió su mandato de forma interina, dado que su periodo oficial concluyó el 21 de diciembre.
Sin embargo, ante la presión de partidos de extrema derecha que impulsaban su destitución, el presidente optó por renunciar para evitar una mayor polarización y el deterioro de la imagen internacional de Rumanía.
La dimisión será efectiva a partir del miércoles, momento en el cual el presidente del Senado, Ilie Bolojan, asumirá la presidencia de manera interina hasta la celebración de los nuevos comicios en mayo.
Esta situación se produce en un contexto de creciente apoyo a partidos de extrema derecha en Rumanía, especialmente tras el sorprendente desempeño del candidato ultraderechista Călin Georgescu en la primera vuelta de las elecciones anuladas. Se espera que las próximas elecciones presidenciales, programadas para el 4 de mayo, definan el rumbo político del país en medio de estas tensiones.