La actriz, que estrenará la serie «Montecristo», realizada en España, se dice orgullosa de ser portavoz de más mujeres que, como ella, buscan ir en contra de los estereotipos.
La primera vez que Esmeralda Pimentel se dio cuenta de que su voz podía ser un agente de cambio fue cuando asistió a una marcha por la guardería ABC. En 2009, aquel incendio ocurrido en Hermosillo, Sonora, provocó la muerte de 49 bebés y 81 resultaron con graves heridas.
“Nunca antes había estado en una marcha y al estar rodeada de los padres de familia que estaban exigiendo justicia para sus hijos, ver que las autoridades no respondían y la indiferencia de la sociedad, fue en ese momento en el que dije: ‘necesitamos a todos y sí, mi voz es importante, y sí, mi voz vale”, dice Pimentel.
La actriz de 33 años dice haber sido víctima de discriminación en la industria del entretenimiento cuando en 2020 se cortó el cabello; desde entonces lucha por romper los estereotipos de belleza que se imponen en cine y tv. También se quitó los implantes de senos que le estaban haciendo daño y apeló a la aceptación del cuerpo tal como es.
“Habemos muchas mujeres maravillosas que queremos cambiar la narrativa, nos estamos cuestionando las reglas y las estamos cambiando y me siento muy orgullosa de aprender a usar mi historia y a usarme a mí misma para ser un referente. Ojalá que las mujeres puedan soñar con ser otra cosa”.
