Melbourne,— En una medida sin precedentes, el gobierno del estado australiano de Victoria autorizó el sacrificio de aproximadamente 750 koalas mediante disparos desde helicópteros en el Parque Nacional de Budj Bim. La decisión se tomó tras un incendio forestal que arrasó más de 2,000 hectáreas de matorrales, dejando a numerosos koalas heridos, deshidratados o al borde de la inanición.
El Departamento de Energía, Medio Ambiente y Clima de Victoria justificó la acción como una medida humanitaria, argumentando que muchos de los koalas afectados estaban en condiciones críticas y que el terreno inaccesible impedía su rescate y tratamiento adecuado. La primera ministra de Victoria, Jacinta Allan, defendió la estrategia, señalando que se basó en evaluaciones exhaustivas realizadas por expertos en bienestar animal.
Sin embargo, la operación ha generado una fuerte polémica. Organizaciones como la Alianza por los Koalas y políticos del partido Justicia Animal criticaron la falta de verificación sobre la presencia de crías en las bolsas marsupiales y cuestionaron la capacidad de evaluar el estado de salud de los animales desde el aire. Además, señalaron que esta es la primera vez que se emplea una estrategia de este tipo en Victoria, lo que podría sentar un precedente preocupante.
Cabe resaltar que en 2022, la especie fue declarada en peligro de extinción en varias regiones del país.