TOROS, ARTE Y TRIUNFO EN LA PLAZA “LA LUZ”
Texto y fotos: Juan José López Luna
Con poco más de media entrada y ambiente festivo se dio la cuarta corrida de feria en la plaza de León, estando colgados en el cartel Leo Valadez, el español Borja Jiménez y Arturo Gilio, quienes despacharon un bravo y noble encierro de De La Mora, siendo premiados con arrastre lento y vuelta al ruedo 4 de los 7 astados, los dos primeros diestros cortaron 3 orejas y salieron a hombros junto con el ganadero.
LEO VALADEZ SALIÓ AL RUEDO COMO LEÓN HAMBRIENTO
El diestro de Aguascalientes Leo Valadez salió al ruedo como un león hambriento, pero de triunfo recibiendo a su primero toro de rodillas en el centro del ruedo con una larga y 2 más en tablas, con el capote estuvo variado en verónicas y chicuelinas, un quite por saltilleras con gaoneras y remate a una mano, después cubrió el tercio de banderillas invitando a su peón “El Panita”, ya con la muleta y el público entregado, comenzó en los medios con cambiados por la espalda, varios adornos y luego se dio a torear por la derecha en 2 tandas, muy toreras, se cambió la muleta a la mano izquierda y pegó 2 tandas de naturales largas y tersas, remates y adornos, todo lo jaleaba la gente con fuerza pues toro y torero transmtían la emoción al tendido, cerró la faena Leo con unas manoletinas y dejó un estoconazo recibiendo para ser premiado con las 2 orejas, mientras al toro le dieron arrastre lento. Con su segundo, Valadez quiso llevarse la gloria y de nuevo se fue a los medios para recibirlo de rodillas, salvándose de un serio percance al adelantar el engaño y el astado le pasó por encima, después en tablas otras dos largas y siguió en los tercios con otras 3 más, lo que hizo prenderse a la gente que loca le coreaba todo, todavía hizo un quite por zapopinas y una media de ensueño, volvió a cubrir el segundo tercio ante la algarabía general y luego con la muleta inició de rodillas en el tercio de sol con derechazos, adornos de pie y luego tandas por la derecha y la izquierda, todo con su sello y torería, más adornos y nuevas tandas por ambas manos y cerró con manoletinas de pie y de rodillas, pero cuando ya flameaban los pañuelos para pedir las orejas, se tiró a matar y pinchó, de nuevo se fue tras la espada y la sepultó para que aún le concedieran 1 oreja.
BORJA JIMÉNEZ CALÓ Y TRIUNFÓ CON SU TOREO
El diestro español Borja Jiménez se presentó en esta plaza cayendo de pie, calando hondo con su toreo y triunfando con un toro de regalo, para salir a hombros acompañado de Leo Valadez y el ganadero Alberto Villareal. Con su primero Borja lo recibió con verónicas de manos desmayadas que gustaron y une media de remate, con la muleta comenzó en displicentes pases por alto combinados con adornos muy toreros que prendieron la mecha en los tendidos, después fue engarzando tandas de derechazos de muy buena factura y con un sello distinto sin tanto acartonamiento, después naturales muy toreros y en redondo, la gente le jaleaba fuerte los olés, larga la faena y con adornos distintos, para al final irse Borja tras la espada y dejarla entera, la gente pedía las orejas y sólo le otorgaron 1. Con su segundo el español quería reventar la plaza y de rodillas lo recibió con 4 faroles emocionantes, luego de pie ligó unas verónicas muy toreras durmiéndose en el viaje y las manos bajas, remató y llevó al toro con chicuelinas andantes al piquero, todavía pega un quite por chicuelinas y remate con una media y recorte a una mano, ya con la muleta fue ligando una faena llena de torerismo en pases de tanteo, tandas de derechazos y naturales largos y en redondo aprovechando la calidad del astado, otra faena larga con matices muy interesante por el sello que le imprimía el diestro, adornos finales y cuando ya tenía en la bolsa las orejas, se fue tras la espada y se dio pinchar muchas veces ante la desilusión de la gente, que aún así lo sacó al tercio. Pero luego regaló un séptimo toro y ahí fue la locura total, pues se arrancaba de muy largo con celo y fijeza, desde el capote y con muleta la faena fue larguísima, torerísima y muy emocionante por el grandioso juego del toro, tandas y tandas de naturales y derechazos, adornos diversos, la gente agitaba los pañuelos pidiendo el indulto, el juez no lo concedía el torero se desconcertó, siguió toreando la petición arreciaba, más pases y el toro seguía embistiendo con celo, al final desconcentrado Borja se tira a matar ante las protestas de la gente y pincha, luego deja tres cuartos en buen sitio y aunque el público loco de emoción pedía las orejas el juez sólo concedió una, vuelta al toro y vueltas del torero con el ganadero Alberto Villareal.
ARTURO GILIO, TOREA PERO NO TRANSMITE AL TENDIDO
El tercer espada Arturo Gilio, que de novillero emocionaba y hacía creer que de matador sería un torero importante, desilusionó a la gente con su actitud desaprensiva y hasta arrogante, mucha estética y técnica del toreo, pases y pases de muy buena factura, ortodoxos, clásicos, pero sin transmitirle emoción al público, sólo en algunos momentos provocó olés fuertes, pero nada mas, ni con su primero ni con el segundo, fue casi una copia en ambos, aunque en el segundo le dieron 1 oreja protestada, una actuación desangelada del novel torero. Ojalá rectifique el camino porque cualidades para figurar las tiene, pero será cuando salga al ruedo convencido de que es torero, y el torero debe emocionar para llegar.
JORGE ENRIQUE LO DE ELÓN POR SI TE SIRVE
