El gobierno de Estados Unidos anunció recientemente que sus embarcaciones estarían exentas de pagar tarifas al transitar por el Canal de Panamá, lo que representaría un ahorro significativo para la nación norteamericana. Sin embargo, el presidente panameño, José Raúl Mulino, desmintió categóricamente la existencia de tal acuerdo, calificándolo de “falsedad intolerable”.
Mulino enfatizó que ni él ni su administración tienen la autoridad para modificar o eximir las tarifas del canal, ya que estas son establecidas por la Autoridad del Canal de Panamá (ACP). La ACP confirmó que no ha realizado cambios en su estructura tarifaria y que no existe ningún convenio especial con Estados Unidos en este sentido.
Este anuncio por parte de Estados Unidos se produce tras la visita del secretario de Estado, Marco Rubio, a Panamá, donde se discutieron temas relacionados con el canal y la migración. La situación ha generado tensiones diplomáticas, especialmente después de que el presidente Donald Trump sugiriera la posibilidad de que Estados Unidos recupere el control del canal, alegando preocupaciones sobre la influencia china en la región.
El presidente Mulino ha sido enfático en defender la soberanía panameña sobre el canal, subrayando que la Constitución y las leyes nacionales regulan claramente que no se pueden eximir tarifas en el canal. Desde que Panamá asumió el control total del canal en 1999, ha mantenido su autonomía en la gestión y operación de esta vital ruta marítima.