Roberto Godínez
Salamanca, Gto., 11 de agosto del 2025. –
Comerciantes del mercado Tomasa Esteves expresaron su inconformidad ante el anuncio del presidente municipal César Prieto Gallardo, quien informó que no se realizará obra pública ni de mantenimiento en el actual centro de abasto debido a un supuesto consenso ciudadano que apoya su reubicación.
De acuerdo con el alcalde, una encuesta aplicada por su propia administración arrojó como resultado que la ciudadanía respalda el traslado del mercado a un nuevo espacio, cuyo proyecto —según afirmó— ya se encuentra en desarrollo.
Sin embargo, los locatarios cuestionaron la legitimidad de dicha encuesta y acusaron a la autoridad municipal de actuar de manera unilateral.
“Nosotros desconocemos completamente esa encuesta, parece hecha a modo”, declaró Amador Camacho, comerciante del Tomasa Esteves y exregidor del Ayuntamiento.
Camacho criticó que el gobierno local no haya dialogado previamente con los comerciantes antes de presentar la propuesta de reubicación.
“Creo que el alcalde está pensando al revés. Primero debió haber consenso con los locatarios y no solo hacer una encuesta a modo con su gente cercana”, apuntó.
Además, se mostró escéptico respecto a la viabilidad del nuevo mercado que propone la administración municipal.
“Por los tiempos, ni siquiera creo que se concrete el proyecto. No va a haber ni nuevo mercado ni remodelación del actual. Este mercado es un centro neurálgico de comercio y tradición en Salamanca. Todavía se le pueden hacer muchas mejoras, solo falta ordenarlo”, agregó.
Camacho también rechazó la narrativa del alcalde que asegura que el mercado está colapsado.
“No está colapsado, está desordenado, y eso es responsabilidad de las autoridades. No hay presencia del municipio; lo que vemos es una anarquía total en los alrededores del mercado”, sentenció.
Por su parte, Pedro Martínez, comerciante que trabaja en la calle Sánchez Torrado, fue más allá y acusó al gobierno municipal de generar confrontaciones entre los propios locatarios.
Aseguró que ya se han presentado intentos de riña entre comerciantes, provocados por acciones del propio Ayuntamiento.
“Los empleados municipales señalan a ciertos comerciantes y dicen que las multas vienen por quejas de otros locatarios, no por aplicación del reglamento. Están dividiendo al gremio”, denunció.
