Andrés Ortiz
Ciudad de México. 22 de enero del 2025. –
Auditorio Nacional recibió con brazos abiertos al musico rosarino Fito Páez, quien brillante sobre el mic deslumbró a diez mil fanáticas y fanáticos, con un recorrido musical por uno de los álbumes más importantes de la música hispana; ‘El amor después del amor’.
Diez minutos después de las 9:00 de la noche, la canción homónima hacía vibrar a todos los presentes en el recinto, lo que provocó una voz al unisonó debido a la emotividad.
De pronto, emergió desde atrás de las pantallas la figura icónica de Rodolfo Páez con un elegante atuendo, comandando a nueve talentosos músicos en escena.
Siguió como en orden del disco de 1992 la memorable ‘Dos días en la vida’, después un momento de película y amor con “La Verónica”; estruendo y acción en “Tráfico por Katmandu”.
El ídolo argentino Luis Alberto Spinetta fue recordado por Fito al presentar “Pétalo de sal”, pieza musical que grabaron juntos, y con ella dedicó unas palabras al difunto artista: “nació y vivió una persona delirante, exótica, que nunca se dejó avasallar por lo que pasaba allá afuera, simplemente fue él, y nos deja a todos un legado infinito”.
Las ovaciones seguían y seguían, pues el músico continuaba entregando temas increíbles y parte de EADDA. “Un vestido y un amor (Te Vi)”, “Tumbas de la Gloria”, “Creo”, “El muro de los lamentos”, “La rueda mágica”, “A rodar mi vida” dejaban a las personas impactadas y entregadas a Páez.
Presintiendo un posible final -algo que el de Rosario repitió dos veces más en la noche-, ‘Brillante sobre el mic’ encendió las linternas de todos los celulares, algo muy emotivo en el concierto que presentaba.
Después de la pausa que el mismo Fito anunció, las luces se hicieron verdes y retumbó en todo el lugar ‘Al lado del camino’, siguiendo con otro de los éxitos ’11 y 6’, y la muy esperada ‘Circo beat’ del disco que continuo su carrera en 1994.
La noche se mantenía en rigor, y el musico sin parar agradecía las muestras de cariño, dando al público ‘Dar es dar’, ‘Ciudad de pobres corazones’ que reventó en poder a todos los asistentes. ‘Cadáver exquisito’, ‘Mariposa tecknicolor’ y finalmente ‘Y dale alegría a mi corazón’ provocó un canto del público todavía minutos después de terminar de tocarla, pues el Auditorio Nacional se mostraba eufórico yante semejante presentación tan impecable.
La presentación tendrá una segunda vuelta este 22 de enero en el mismo lugar, tras dejar con éxito dos conciertos antes, uno desde el Zócalo capitalino el 18 de enero, y la inicial del auditorio este 21 de enero.
