Salamanca.- Luego de insistir y responsabilizar a la CFE de cualquier lesión o daño a su patrimonio debido a que los cables de alta tensión estaban sobre el muro de su casa, la empresa acudió al lugar, pero realizó el trabajo a medias.
El pasado 24 de junio, Juan N. explicó que los cables de la red pública que pasa por la calle Progreso, en la zona centro, tocaban o estaban “recargados” en el muro del segundo piso de su casa, ubicada en la esquina de López Lira y Progreso.
El afectado señaló que una pantalla de televisión ya había sufrido daños y que, tras acudir a las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sin recibir respuesta, advirtió que responsabilizaría a la empresa por cualquier descarga eléctrica que pudiera afectar a él o a su hijo. 
Finalmente, la CFE envió una cuadrilla de trabajadores que colocó un nuevo poste de concreto en el camellón de la calle para enderezar otro poste inclinado. Sin embargo, aunque los cables quedaron separados alrededor de 10 centímetros de la finca, el aire los sigue empujando contra el muro.
Además, los trabajadores dejaron cables de telefonía, internet y televisión colgando a baja altura, lo que ahora genera un riesgo para los vecinos y peatones que transitan por la zona.
