Jacqueline Ovalle Muñoz ha marcado un antes y un después en el fútbol femenil internacional. La jugadora mexicana se convirtió en la futbolista más cara de la historia, luego de concretarse su traspaso al Orlando Pride de la NWSL.
El club estadounidense pagó alrededor de 2 millones de dólares por la delantera, superando ampliamente el récord anterior de 1.35 millones que ostentaba la canadiense Olivia Smith. Con este movimiento, Ovalle no solo se coloca en la élite del fútbol femenil, sino que también abre la puerta a nuevas oportunidades para jugadoras mexicanas en ligas de gran proyección.
El contrato firmado es por tres años, hasta 2027, con la opción de extenderse un año más. Sin embargo, su debut oficial dependerá de que se concrete la visa P-1 y el Certificado de Transferencia Internacional, documentos necesarios para incorporarse de lleno al equipo.
Conocida como “La Maga”, Ovalle llega al Orlando Pride tras una exitosa etapa con Tigres Femenil, donde conquistó títulos y se ganó el cariño de la afición. Ahora, con este traspaso histórico, se espera que su talento siga brillando y que inspire a nuevas generaciones de futbolistas en México y el mundo.