Dos años después de su muerte, en el primer Mundial que se celebra desde su fallecimiento, la Conmebol organizó este viernes en Doha un homenaje a Maradona con antiguos compañeros y rivales, coincidiendo todos en una misma idea: «¡Diego es inmortal!».
El mito del futbol argentino falleció en Buenos Aires por una crisis cardíaca el 25 de noviembre de 2020, con 60 años recién cumplidos y un legado futbolístico que se recordará durante generaciones.
«Diego nos pertenece a todos y habría que recordarlo con alegría, porque si algo nos ha dejado es una deuda de felicidad», aseguró en su discurso Jorge Valdano, uno de sus compañeros de generación, testigos directos de su encumbramiento en el Mundial de México-1986, cuando llevó a la Albiceleste a su segunda y última estrella.
Valdano vistió para la ocasión una camiseta con la imagen de Maradona besando la Copa del Mundo en 1986, con la palabra ‘Capitán’ y el número ’10’, al igual que hicieron todos los campeones de 1978 (Fillol, Kempes, Bertoni, Villa, Larrosa y Tarantini) y de 1986 (Ruggeri, Pumpido, Burruchaga, Giusti, Batista, Borghi, Tapia y Héctor Enrique) presentes en el acto, celebrado este viernes en el ‘Árbol de los Sueños’, el espacio en el centro de Doha que la Conmebol ha dedicado a la historia del fútbol sudamericano.
Al acto también asistieron exjugadores de otras generaciones (Diego Simeone, Javier Zanetti o Juan Pablo Sorín), así como rivales; el brasileño Mauro Silva, el paraguayo Roque Santa Cruz e incluso el búlgaro Hristo Stoichkov, quien se emocionó recordando al ídolo.
¡Cómo no!, el homenaje estuvo acompañado musicalmente por algunos de los ‘himnos’ que se asocian a Maradona, como las canciones que le dedicaron Andrés Calamaro y Rodrigo Bueno, y el ‘Life is Life’ de Opus, en un popular vídeo del ’10’ haciendo malabarismos durante el calentamiento de un partido del Nápoles en 1989
Fuente: Mediotiempo